Hoy voy hablar de 3 ideas para enseñar a compartir a las niñas,
pero antes podría pasarme un buen rato
aclarando el concepto y origen de compartir. No lo voy hacer…yo soy así…no
me gusta dar muchas explicaciones, yo prefiero aplicarlo y explicar el porqué.
Para comenzar hablaré de un error para mi entender muy común,
en determinadas edades: de 1 a los 3 años aproximadamente, por motivos de
desarrollo no podemos pedir en determinadas situaciones, muchas…que compartan
objetos porque “se ha de compartir” no “están preparados”, están en un momento
en que necesitan propiciar su egoísmo y sus propias pertenencias. Es decir, si
viene una niña a clase con un objeto de casa
y una compañera se lo quita, ni siquiera lo pide, no podemos EXIGIR que
comparta, depende como sea el compartir se puede convertir en algo agresivo
siempre depende del enfoque que le demos. Es tan sencillo como que si la niña
quiere compartir pues lo comparte y justamente habrá llevado el objeto a clase
con ese fin, pero a veces no es así e igual que no nos gustaría que fueran a
nuestra casa y se pusieran nuestros zapatos o nuestro pijama, así sin más
porque se ha de compartir, hemos de ver que compartir ha de ser algo natural,
respetuoso y sincero. Solo así realmente dejará de ser un mero concepto como es
a veces vacio y sin sentido.
1) El
primer truco es cambiar el concepto de “propiedad”, si en clase de manualidades
hay material, el material no se comparte ¿Qué por qué? Porque el material es de
todas, es común, es nuestra responsabilidad, es NUESTRO. Ese concepto implica
una cadena de cambios en el concepto “compartir” muy importantes…
2) A
veces soy muy mala, y me gusta crear conflictos en clase, por eso a veces hay
menos de algo necesario: menos tijeras, menos rotuladores permanentes,…eso las
obliga a administrar el material, a esperar a que acabe una para continuar la
otra, a decirle a la compañera “acabo y te lo paso”. Eso si siempre dando la
seguridad de que todas van a disponer de ello y no se van a quedar sin.
Cuando hay tijeras para todas he
visto mil veces la situación, de abalanzarse sobre ellas, coger cada uno una
como si no hubiera un mañana y dejárselas al ladito y que no se las toquen.
En clase a veces cogen tres
tijeras y las vamos utilizando según necesidad. Ya no le damos importancia a de
quien son.
3) A
pesar de no tener propiedad el material, mil veces pasa que en ese mismo
momento a dos y hasta tres personas quieren jugar con el mismo objeto. Entonces cojo un
cuchillo y lo parto en tres trozos. (es broma, pero a veces me dan ganas!)
Lo ideal sería no intervenir y
que ellas resuelvan su conflicto, yo espero… que la cosa va a mayores, que
suele pasar, entonces es tan sencillo como decir “un rato cada uno”, el que
suele tenerlo en las manos se lo queda si lo acaba de coger, y cuando acabe lo
tiene que ceder para que lo disfrute su rato al siguiente que lo quería. A
veces el que espera el juguete te dice,
no me lo da y lleva mucho, entonces se le dice al que lo tiene: Ya llevas un
rato le toca disfrutarlo a ella. Y no suele poner problemas y se lo da. Que se
queda con ganas de disfrutarlo un rato más, Pues cuando acabe la compañera que
se lo devuelva. Así se pueden pasar las horas. Pero no hay lloros, ni enfados…tiene
su lógica para ellas y saben que lo van a disfrutar seguro cuando les toque.
Estos son mis 3 truquillos, jamás
los mejores y únicos y verdaderos, los míos ahora mismo y así os los explico….¿me
contáis los vuestros?
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